Una vez establecido tus objetivos financieros, definida tu situación económica y tu personalidad financiera, y además, complementado tus conocimientos financieros básicos de los conceptos y productos financieros, estamos en disposición para iniciar el proceso de desarrollo, implantación, coordinación y evaluación y seguimiento de la estrategia más adecuada para alcanzar tus objetivos establecidos.
Tal estrategia variará en función de tu perfil y tus objetivos. Sin embargo, independientemente de cuales sean éstos, te aconsejo que tu principal objetivo sea el de salvaguardar tu futuro financiero. Si por lo contrario tu situación económica goza de tal comodidad, evalúa otras alternativas hasta encontrar la que mejor se corresponda a tu perfil.
A continuación te mostramos un ejemplo de planificación únicamente para crear capital, para la parte de optimizar el capital previamente creado y protección es necesario determinarlo en su momento concreto de actuación. Lo que pretendemos con este ejemplo es transmitir la importancia de elegir bien el producto adecuado con la finalidad de crear capital.
No tendremos en cuenta la personalidad financiera ya que este caso es hipotético e impersonal, por lo que carece de personalidad financiera. Además, aunque la fiscalidad es una area muy importante de la planificación, tampoco la tendremos en cuenta para este ejemplo dado que ésta requiere, en todos los casos, de asesoramiento profesional.
En el supuesto que el estudio del perfil socioeconómico determine que se dispone de un excedente económico apróximado de 1.969 € mensuales, estabilidad laboral fiable y 11.500 € de ahorro:
Primer objetivo, 2500 € para la operativa bancaria.
Para empezar, destinaríamos 2.500 € del capital disponible a la operativa bancaria en una cuenta corriente. Encontrarás consejo sobre cómo escoger una entidad financiera adecuada para tu perfil en mi entidad financiera
La rentabilidad no es un factor a tener en cuenta en este objetivo, pues lo determinante sería que no te cobrasen comisiones por la operativa.
Segundo objetivo, 9.000 € para imprevistos.
Destinaríamos los 9.000 € del capital disponible restante. El horizonte temporal de este objetivo es incierto porque se podría necesitar el capital en cualquier momento. Es por esta razón que se le asignaría un producto con alta liquidez y la mínima volatilidad. Un fondo de inversión con filosofía muy conservadora sería lo más adecuado. Que invierta en activos xxx y xxx. Y que su filosofía de inversión sea ofrecer una rentabilidad superior a la ofrecida por las tradicionales cuentas corrientes.
La rentabilidad media anual se situaría en sobre 3%. Por lo que con una inflación media anual del 3,18%, la perdida de poder adquisitivo del capital invertido sería mínimo.
Tercer objetivo, 25.000 € para los estudios universitarios de los hijos en un horizonte temporal de 13 años. Con un incremento medio del 3,18% anual de los precios, el valor a marcar como objetivo a la finalización del plazo sería 37.556,21 €.
El horizonte temporal de este objetivo es a largo plazo. Se le asignaría un fondo de fondos de inversión, que invierta principalmente en fondos de xxx, con una inversión realmente global que cubra todos los mercados, sin límites regionales, sectoriales, de estilo de gestión y capitalización. Con este producto aprovecharíamos las oportunidades ofrecidas por el progreso mundial.
La rentabilidad media anual se situaría sobre el 8,30%.
Las aportaciones mensuales serían de 135 €, frente a los 184 € con un producto remunerado al 1,5%. El ahorro conseguido es de 49 € al mes y 7.644 € a la fecha establecida para el objetivo.
Cuarto objetivo, 20.000 € para emprender un negocio en dos o tres años. Con un incremento medio del 3,18% anual de los precios, el valor a marcar como objetivo a la finalización del plazo sería 21.292,22 €.
En este caso para determinar el horizonte temporal de este objetivo escogeriamos el más corto, dos años. Le asignaríamos un fondo que siga la estrategia flexible de invertir en instrumentos financieros como xxx, xxx, xxx y xxx, con el objetivo de preservar el capital del riesgo inflacionario. De este modo el capital ahorrado mantendría el poder adquisitivo inicial.
La rentabilidad media anual se situaría sobre el 4%. Con una inflación media anual del 3,18%, el rendimiento del capital invertido superaría la inflación y los impuestos pertinentes, además de un ligero aumento de su poder adquisitivo.
Las aportaciones mensuales serían de 834 €, frente a los 858 € con un producto remunerado al 1,5%. El ahorro conseguido es de 24 € al mes y 576 € a la fecha establecida para el objetivo.
Quinto objetivo, 138.000 € para cancelar la hipoteca en 15 años. En este caso no hay que tener en cuenta la inflación, pues el objetivo hipotecario a cancelar no es un producto de consumo y por tanto no varía su valor.
El horizonte temporal de este objetivo es a largo plazo. Se le asignaría un fondo de fondos que inviertiese principalmente en fondos de xxx, siguiendo una estrategia de inversión que tuviese como objetivo los sectores xxx de la economía mundial.
La rentabilidad media anual se situaría por encima del 8,10%. Frente al pago de la deuda al 4% anual, el margen diferencial es de más del 4% anual.
Las aportaciones mensuales serían de 389 €. Si estas aportaciones se usaran para cancelar hipoteca, al final del período restaría un saldo pendiente de unos 44.000 €, más unos 4.500 € de intereses. El ahorro en este caso sería de 48.500 €.
Sexto objetivo, 50.000 € para cambiar de vivienda dentro de 15 años. La vivienda es un activo que fluctua en base a la oferta y la demanda. Para determinar el valor futuro del objetivo estariamos atentos a las perspectivas del mercado. La perspectiva actual es de una larga depreciación, entonces el valor sería el mismo que a fecha de la planificación.
El horizonte temporal de este objetivo es a largo plazo. Se le asignaría un fondo que su objetivo de inversión fuese la apreciación del capital en el largo plazo a través de la selección de títulos de xxx, con una amplia exposición a los xxx. Y que pudiese utilizar instrumentos como xxx y xxx para una gestión más eficiente de la cartera.
La rentabilidad media anual se situaría por encima del 8,10%.
Las aportaciones mensuales serían de 141 €, frente a los 203 € con un producto remunerado al 1,5%. El ahorro conseguido es de 62 € al mes y 11.160 € a la fecha establecida para el objetivo.
Séptimo objetivo, 257.849 € para la jubilación dentro de 30 años. Con un incremento medio del 2,33% anual de los precios, el valor a marcar como objetivo a la finalización del plazo sería 514.583 €.
El horizonte temporal de este objetivo es a largo plazo. En este caso concreto sería aconsejable asignar un producto que tuviese en cuenta el "ciclo de vida". Es decir, que al inicio la inversión se efectuase en xxx, y ésta se fuese posicionando en activos menos volatiles, a medida que se fuese acercando la fecha establecida.
La rentabilidad media anual adaptada al ciclo de vida se situaría sobre el 4,93%.
Las aportaciones mensuales serían de 470 €, frente a los 753 € con un producto remunerado al 2,5%. El ahorro conseguido es de 283 € al mes y 101.880 € a la fecha establecida para el objetivo.
Llegado a este punto de la planificación, el diferencial entre el excedente disponible y las aportaciones realizadas, se podrían añadir un Plan de Aportaciones de Capital como nuevo objetivo.
El horizonte temporal de este objetivo es a largo plazo. Se le asignaría un fondo de fondos de inversión, que invierta principalmente en fondos de xxx, con una inversión realmente global que cubra todos los mercados, sin límites regionales, sectoriales, de estilo de gestión y capitalización. Con este producto aprovecharíamos las oportunidades ofrecidas por el progreso mundial.
La rentabilidad media anual se situaría sobre el 8,20%.
Las aportaciones mensuales serían de 0 € los dos primeros años. Se iniciaría el plan con 834 € durante 11 años. Se incrementaría en 135 € durante dos años más. Se añadiría 530 € para el resto del plazo.
Finalmente el ahorro reinvertido, nos daría un capital final estimado de 1,368.019 €.
La situación del cliente a la fecha de jubilación sería la siguiente:
Su familia habría estado cubierta contra posibles imprevistos. La perspectiva laboral de sus hijos sería favorable. Habría tenido la posibilidad de mejorar su calidad de vida trabajando en algo de lo que disfrutase. Tendría en propiedad una vivienda espaciosa y cómoda. Dispondría de unos ahorros de 514.583 €, más 1,368.019 €. Tolal 1,882.602 €, con un poder adquisitivo a fecha actual de 943.342 € para su jubilación. 685.493 € más de lo que se pretendía inicialmente.
Durante este tiempo se irían reconsiderando los objetivos financieros para tomar las medidas de reconducción oportunas.
*Las rentabilidades anteriormente mostradas son estimadas. El objetivo de los productos escogidos es salvaguardar tu futuro financiero, por lo que no asumen riesgos innecesarios a detrimento de conseguir altos rendimientos.
*La estrategia escogida con los objetivos de crear capitales es el Plan de Acumulación de Capital. Esta táctica reduce riesgos y permite comprar más cuando los precios son bajos, y menos cuando los precios suben. A lo largo, resulta más rentable porque no se pierden los mejores momentos de los mercados, y se aprovecha mejor el poder de los intereses compuestos.
*Deben construirse carteras de inversión lo más diversificadas posible y adaptadas a tu perfil. Los fondos de inversión, creados según este principio, representan una inversión ideal. La filosofía de inversión del fondo determinará si es adecuado o no para tu perfil.
*En el mercado existe un abanico muy amplio de fondos de inversión con una variada filosofía de inversión. Es fácil caer en error de pensar que cualquier fondo es válido para conseguir tus objetivos. Esto no es así, este es el proceso de la planificación que mayor valor va a generar en la consecución de tus objetivos. Consulta con tu Consultor Financiero Personal para asignar los activos que mejor se correspondan a tu planificación financiera.
*No permitas que ninguna entidad te coloque sus productos. Es muy posible que no sean lo que necesitas, e incluso, que la repercusión de éstos pueda ser perjudicial para ti. Los empleados de banca no son asesores financieros y sólo el 10% de los directores son realmente conocedores de los productos que ofrecen. Aun así, se ven obligados a colocar sus propios productos para llegar a los objetivos fijados por sus superiores.
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