lunes, 20 de octubre de 2014

Las siete claves del éxito para ahorrar (y ganar) a largo plazo

El ahorro a largo plazo protagonizó buena parte del programa de Bolsalia, el salón de la bolsa y los mercados financieros celebrado en madrid el pasado 16 y 17 de octubre. Varios ponentes destacaron la importancia de planificar nuestro ahorro a futuro en un momento como el actual. Y Francisco Márquez de Prado, Executive Sales en JP Morgan AM, aportó las siete claves que deben regir un plan de ahorro a
largo plazo. Y, cuidado, porque una de ellas es traicionera.

Planificación. "Para ahorrar hay que tener un plan. Los Siete Magníficos ganaron la batalla porque tenían un plan" aseveró Márquez de Prado. Es indispensable valorar toda una serie de factores personales a la hora de elaborarlo. Hay que plantearse un objetivo. Ser consciente del volumen de ahorro que tenemos y el que queremos alcanzar. Y, sobre todo, calibrar nuestro perfil de riesgo para determinar el tipo de productos y activos que nos van a permitir alcanzar el objetivo deseado.

Riesgo. No es una foto fija. Varía con el paso de los años, con las variaciones de nuestro volumen de ahorro, entre otros muchos factores. Puede resultar importante analizar cada cierto tiempo la cartera para ajustar nuestro grado de aversión o apetito por el riesgo y para ello Márquez de Prado recordó la "teoría del umbral del sueño". Si nuestras inversiones nos impiden dormir, puede ser que hayamos invertido en el activo equivocado. De manera que puede ser aconsejable buscar posiciones más con las que nos sintamos más seguros. No obstante, hay otros muchas maneras de medir el perfil de riesgo de cada ahorrador. Un buen asesor financiero debería contar con las herramientas adecuadas para medirlo.

Disciplina. Es fundamental. Es importante controlar las emociones para cumplir con nuestro plan de ahorro. Los impulsos que nos llevan a realizar movimientos poco reflexionados pueden tener efectos desastrosos. Por ello, conviene mantener el control, analizar, reflexionar y comprender todas las decisiones y herramientas de inversión que utilizamos en nuestra planificación.

Paciencia. Está muy relacionada con la clave anterior. La paciencia es la clave fundamental de una buena disciplina. Sin ella, nos dejamos llevar por nuestros impulsos. El experto de JP Morgan AM mostró a los asistentes de Bolsalia cómo la renta variable es el activo que más rentabilidad ha ofrecido a los inversores en el largo plazo. Eso sí, los largos periodos de turbulencias y pérdidas son inevitables en los largos periodos. Nada mejor que mantener la calma para superarlos.

Permanencia. Una inversión realizada en todo el SP-500 en 2004 hoy vale un 70% más. Y si nos retrotraemos a décadas anteriores, el crecimiento es realmente exponencial. La bolsa parece premiar la paciencia y la permanencia en el largo plazo.

Diversificación. Una cartera de ahorro a largo plazo se debe componer de diferentes activos. No es muy aconsejable jugársela todo a una. Por ello, Márquez de Prado considera fundamental tener una cartera diversificada. Y un buen ejemplo de ello es el JP Morgan Global Income, que cuenta con una cartera compuesta por 308 acciones de renta variable y 1.647 obligaciones de renta fija.

Inflación. "De los Siete Magníficos hubo uno que traicionó a los demás. Y ese fue la inflación", aseguró Márquez de Prado en Bolsalia. Por ello, destacó el papel de la rentabilidad compuesta, la que tiene en cuenta este indicador, en un plan de inversión a largo plazo. La subida de los precios desvaloriza el ahorro. Asegurarnos de que los rendimientos obtenidos supera la tasa de IPC es fundamental.

Fuente: finanzas.com

1 comentario:

Rocío dijo...

La teoría del umbral del seuño me parece una forma muy buena de medir la tolerancia al riesgo. Si no puedes dormir con las inversiones que has hecho, deberías cambiarlas. Me encanta esta idea y la usaré en el futuro.